Los imponentes castillos de Luis II de Baviera
El 13 de junio de 1886 muere misteriosamente ahogado el rey Luis II de Baviera.
El 13 de junio de 1886 muere misteriosamente ahogado el rey Luis II de Baviera, siendo un buen nadador salió a dar un paseo en compañía de su psiquiatra y no regresaron.
Luis II, declarado como esquizofrénico e incapaz de gobernar, sube al trono de Baviera a los 18 años.
Rompió su compromiso matrimonial y se le relacionó con su prima la emperatriz Isabel “Sissi” de Austria. Tuvo varios romances con hombres apuestos, y según sus diarios y correspondencia vivía luchando contra su homosexualidad. Nunca pudo casarse ni dar herederos al trono de Baviera, idealizaba la monarquía absolutista y deseaba unificar Alemania, entonces dividida en pequeños estados.
Era un soñador, su admiración por Wagner le inspiró para construir varios castillos: Linderhof, Neuschwanstein y Herrenchiemsee, usando el dinero de su fortuna personal, los cuales han sido tomados como arquetipos de los castillos de los cuentos de hadas, entre ellos el famoso castillo de la Bella Durmiente en Disneylandia.
Imagen: Hans-Jürgen Münzer
